A todos nos ha pasado. Cuando hemos pensado en hacer turismo por Asturias, hemos planeado una visita a ciudades como Gijón y Oviedo. En cuanto a la otra gran ciudad, Avilés, siempre había un fantasma sobrevolando nuestras cabezas: la ciudad industrial, la de las chimeneas y nubes de vapor de agua. Este hecho ha provocado que mucha gente la pase de largo, sin darle una sola oportunidad. Craso error, pues se trata (en mi opinión) de la ciudad con el casco histórico más bonito de las tres grandes ciudades asturianas.
Hoy vamos a ver por qué merece la pena superar nuestros prejuicios y para ello os voy contar lo que hay que ver en Avilés, la ciudad que más me sorprendió de Asturias, así como sus alrededores.
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